Actuación ante picaduras de arácnidos e insectos

Una picadura es una herida punzante en la que se inyectan sustancias tóxicas (venenos de diferentes animales) pudiendo provocar efectos locales o sistémicos.

A. Picadura de araña

La mayoría de las picaduras de araña son inofensivas y se pueden tratar sin complicaciones a nivel doméstico.

• Protocolo de actuación: 

1. Limpiar la herida con agua y jabón. 
2. Aplicar compresas frías. 
3. Si la picadura se localiza en un brazo o una pierna, elevar el miembro para evitar la inflamación. 
4. Traladar a la víctima a un centro sanitario para tratar de identificar el tipo de araña que la ha picado, aportando la información de la que se disponga. 

• Signos y síntomas: 

Enrojecimiento, hinchazón, picor y dolor. Las reacciones peligrosas incluyen prurito intenso, disnea, náuseas, vómitos, inflamación de garganta con disfagia, sudoración, mareo, entumecimiento, hormigueo, hipotensión, shock, rigidez muscular, temblor y parálisis. La asistencia médica y la identificación del tipo de araña son fundamentales si aparece disfagia, inflamación en la cara, dificultad para tragar, debilidad y coloración azulada (cianosis).


B. Picaduras de avispas y abejas

Las avispas y las abejas forman parte de la especie de los insectos himenópteros, que tienen un aparato bucal con aguijón liso. Al sentirse amenazados, estos insectos ocasionan picaduras que puedes ser

múltiples.
En algunos casos, el aguijón tiene púas y se queda dentro de la victima junto con la bolsa del veneno, por lo que debe ser extraído.

• Protocolo de actuación:

1. En caso de que exista un aguijón, hay q extraerlo sin tocarlo directamente con la mano, por ejemplo con unas pinzas o con una moneda, evitando la presión para que no se inyecte más veneno. 
2. Aplicar compresas de agua fría y, si se dispone, compresas de amoniaco. 

C. Picaduras de garrapata
Las personas entran en contacto con las garrapatas en el campo o por contacto por animales infestados.
Las localizaciones más frecuentes de las picaduras suelen ser lugares calientes y húmedos, como las axilas, la ingle y el cuero cabelludo.

La garrapata muerde la piel y clava su cabeza hasta encontrar un pequeño vaso sanguíneo del que capta sangre. La picadura es relativamente indolora, su riesgo son los microorganismos que la garrapata pueda tener, ya que pueden transmitir enfermedades a los seres humanos.

• Protocolo de actuación:

1. Eliminar la garrapata con unas pinzas tirando lentamente y con suavidad asta que se desprenda la piel. 
2. Si la cabeza queda atrapada en la piel, usar una aguja estéril para extraerla. 
3. Limpiar la herida con agua y jabón. 

D. Picaduras de escorpión

Los escorpiones más comunes pertenecen al género que inoculan veneno por el aguijón. 

En España contamos con esta especie repartida por todo el país, aunque su presencia mayor es en el sur.

Protocolo de actuación:

1. Inmovilizar al paciente. 
2. Limpiar con agua y jabón. 
3. Aplicar hielo. 

• Signos y síntomas

Aproximadamente el 25 % de la población presenta hipersensibilidad al veneno de los himenópteros y por lo tanto pueden presentar anafilaxia.

La picadura de la garrapata provoca un erupción de color rojo, dolor, enrojecimiento, inflamación y malestar general (si este persiste, puede ser señal de una enfermedad transmitida).

El veneno del escorpión ocasiona una reacción local muy dolorosa, eritema, edema e inflamación del sistema linfático. En el caso de los niños pequeños y los ancianos puede aparecer fiebre, sudoración, taquicardia, hipotensión arterial, midriasis, convulsiones e incluso muerte.