NUTRICIÓN Y METABOLISMO

FIEBRE

La fiebre es la elevación de la temperatura corporal que debe a una

modificación del nivel del  termostato hipotalámico. Sus causas más frecuentes son las infecciones virales o bacterianas y las toxinas bacterianas, también la ovulación, la secreción excesiva de hormonas tiroideas, los tumores y las reacciones asociadas con vacunas. Cuando los fagocitos  ingieren bacterias específicas, se estimulan para secretar un pirógeno , que es una sustancia productora de fiebre. El pirógeno circula  hacia el hipotálamo e induce  la secreción de prostaglandinas. Algunas prostaglandinas pueden modificar el termostato hipotalámico para funcionar a una temperatura más elevada, a continuación, se ponen en marcha mecanismos reflejos reguladores que elevan la temperatura corporal hasta este nuevo valor. Los antipiréticos son fármacos que disminuyen o eliminan la fiebre. Algunos ejemplos son la aspirina, el paracetamol y el ibuprofeno, que reducen la fiebre mediante la inhibición de la síntesis de algunas prostaglandinas.

Aunque el aumento de la temperatura central por encima de entre 44 y 46 ºC ocasiona la muerte, hasta cierto punto la fiebre es beneficiosa. Por ejemplo, el aumento de la temperatura intensifica el efecto del interferón y las actividades fagocíticas de los macrófagos y en forma simultánea inhibe la replicación de algunos patógenos. Como la fiebre aumenta la frecuencia cardíaca, los leucocitos capaces de combatir la infección se trasladan a los sitios infectados con mayor rapidez. Además, aumenta la producción de anticuerpos y proliferación de células T.

OBESIDAD

La obesidad es el aumento del peso corporal más de un 20% por encima del valor estándar deseable debido a la acumulación excesiva de tejido adiposo.

La obesidad moderada  también es peligrosa para la salud, se considera un factor de riesgo para la aparición de enfermedad cardiovascular, hipertensión, diabetes mellitus,, varices venosas y enfermedad vesicular.

Algunas veces, la obesidad puede asociarse con traumatismos o tumores de los centros reguladores de la alimentación en el hipotálamo. En la mayoría de los casos de obesidad no se puede identificar una causa específica. Los factores contribuyentes son genéticos, relacionados con los hábitos alimentarios aprendidos durante la primera etapa de la vida, la alimentación excesiva para eliminar tensiones y las costumbres sociales.